El “efecto cara lavada” hace tiempo cobra fuerza.

Es una propuesta más que lógica en tiempos en los que la sostenibilidad y el consumo responsable son un reto y una preocupación social a nivel global.

Hoy somos muchos los que nos preocupamos cada día más por la salud y el bienestar, una búsqueda que sin duda ha cambiado y cambiará aún más nuestros hábitos de consumo. Mucha gente ha comenzado a priorizar el cuidado de la piel, por encima del maquillaje.

En muchas ocasiones ocurre que quienes se maquillan a diario y con productos no respetuosos, naturales y/o ecológicos, debajo de la capa de maquillaje muestran una piel con sensibilidad alterada, lo que puede provocar dermatitis atópica, acné, eccemas, puntos negros, sequedad y otros procesos no saludables de la piel; alteraciones que pueden extenderse a otros órganos como inflamación e infección en labios e infecciones o alteraciones como la conjuntivitis en los ojos.

Para prevenir estos riesgos y el deterioro prematuro del colágeno que provocan los maquillajes te proponemos unas pautas y verás que tu piel recupera poco a poco esa imagen sana y bonita que estás buscando:

  • Elige productos cosméticos y maquillajes que no contengan ingredientes tóxicos y con efectos nocivos para tu salud y el aspecto de tu piel (si quieres saber más sobre esto sigue nuestro blog)
  • DESMAQUILLA Y LIMPIA tu rostro A DIARIO. Al menos una vez por semana realiza una exfoliación suave y efectiva; nuestro Gel Exfoliante Facial es ideal para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles y dañadas, pero puedes elegir otras opciones, incluso ‘fabricar’ el tuyo con ingredientes naturales que todos tenemos en nuestra cocina (si lo deseas en nuestras RRSS puedes encontrar varias recetas).
  • Deja respirar tu piel todo el tiempo posible, es decir déjala ‘al aire’, sin maquillaje siempre que puedas.
  • Aplica un iluminador facial o un producto rico en Vitamina C para recuperar el brillo natural de tu piel, en nuestro catálogo puedes encontrar varios iluminadores, elige el que se ajuste más a tus necesidades.
  • Incorpora un sérum a tus rutinas de cuidado facial para compensar la oxidación, el envejecimiento prematuro y la deshidratación que provoca el uso de los maquillajes.

Recuerda que es muy posible que tengas que cambiar tus cremas faciales, sérums y demás cosméticos dependiendo de la estación del año, de tu ciclo menstrual y/o de las condiciones ambientales coyunturales, sé flexible y ‘juega’ con tu ‘fondo de neceser’, al igual que adaptas tu alimentación según las circunstancias también debes adaptar el alimento de tu piel a éstas, No olvides que la piel es un gran órgano excretor del cuerpo y que ‘paga’ los excesos y los malos hábitos por lo que es muy importante incrementar la limpieza facial tras épocas de abusos como la Navidad y en los cambios de estación.

Y en Naáy siempre somos partidarios de cuidarnos desde dentro, todo lo que utilizas para nutrir tu cuerpo se refleja también en tu piel y puede ser compensado con unos buenos hábitos de higiene y cuidado de la piel.

¡Una piel sana y bonita no necesita ser tapada!

Sin duda una propuesta que nos ayudará a sentirnos mejor con nosotros mismos, además de la satisfacción de hacer un consumo más responsable en productos cosméticos.

 

En Naày ofrecemos productos que cuidan tu piel y respetan el medio ambiente. Descubre cuáles se adaptan mejor a ti.

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